Vivir en pesadilla
Jorge Luis Acevedo
Estupenda fue para los fifis, empresarios, hoteleros y todos los detractores de la 4T, la ignorancia de Javier May respecto a los tramos que correrán del Tren Maya en Quintana Roo.
Se vio a leguas que solo organizó la conferencia de bote pronto para desmentir y salió peor que pateado, bueno ni el Román Meyer se salvó, no, no señor, primero investigue, lleve datos o al menos recorra la zona. Así quiere hacer un proyecto transexenal, pues si no es una de sus obras patito en Comalcalco.
El flamante director del Fonatur minimizó el cuestionamiento de los árboles, ni siquiera dijo que en sus nuevos estudios incluirá al INAH y a todos aquellos con los que Rogelio hizo alianzas y convenios. Aquél ya está riéndose en su nuevo puesto.
Va porque va, es la consigna y contra viento y marea –como decía un ridículo eslogan en Quintana Roo– hará las expropiaciones, ah no no se llaman así, porque lo que se hizo fue una “declaratoria de utilidad pública”. Ojo con eso.
Decir que si se talaron árboles por donde pasará –si es que no lo vuelven a cambiar– el Tren Maya no es relevante porque “tienen un inventario de 500 millones de árboles sembrados” no solo causa mentadas de madre, entre los que vivimos aquí, por qué:
Porque sus 500 millones no se han sembrado en Quintana Roo, porque siembran plántulas que sin cuidado se secan, porque le dieron en todita a ejemplares hermosos, de años, que daban belleza, sombra y oxígeno.
Porque la gente está harta, sí harta, de sus parques de cemento, como el que harán en Chetumal donde barrieron de tajo con 75 ejemplares y a la fecha no ha pasado nada: ni Profepa ha informado ni Carlos Joaquín ni la Yensunni Martínez y por ahí un triste regidor –solo por difusión- está según revisando el caso.
Pero en este país donde la Semarnat es un cero a la izquierda ¿verdad, Javier? ya lo vimos una vez contigo y su titular cuando estaban ambos en Bienestar, pues estamos fritos.
Y ahora espérense al lío de los terrenos en Puerto Morelos y de los ejidatarios que ya no quieren que les den espejitos de a peso en zona maya, esos sí que son bravos.
Cómo que ya se está despidiendo alguien de ese hueso prometido en el Gobierno de México, ya se le fue la elección, ya se le está yendo su trabajito y aguantemos tantito, quizá hasta pierda su libertad, porque no tiene amigos en Panamá ni en Bonfil, simplemente el pobre no tiene amigos.
Ay Tren Maya, escribiré un libro contigo si no antes algún canijo me lo gana.
Por cierto, ya empezaron presidentes a gastar de lo lindo en Madrid con el pretexto de la Fitur, ¿pus’no que están tan bien jodidos?
Ya me acabé mi café, con este enojo de Itztlacoliuhqui.
Nos vemos en la otra entrega y sigamos muy de cerca a Javier May, dará más de qué hablar, seguro.
Reproducción autorizada citando la fuente con el siguiente enlace Quadratín Quintana Roo.
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