CANCÚN, QRoo, 19 de junio de 2019.- Han pasado poco más de seis meses desde que Andrés Manuel López Obrador rindió protesta como Presidente de México y se comprometió a acabar con la corrupción, con los amiguismos, con los contratos en lo oscuro, sin embargo eso no ha sucedido y continúa actuando como la antigua mafia del poder.

Un ejemplo de ello es un caso en Jalisco, en donde el delegado del Gobierno de México de dicha entidad, Carlos Lomelí, podría verse beneficiado con una millonaria licitación a través de una de sus empresas del ramo farmacéutico.

Lo anterior, a pesar de que había prometido que ninguna de sus empresas participaría en licitaciones públicas para no despertar sospechas de que se beneficiaría de su relación con Andrés Manuel López Obrador.

Pero esto no sucedió: apenas el 17 de junio de llevó a cabo la licitación pública internacional abierta electrónica número LA-012000991-E82-2019 para medicamentos, material de curación, material radiológico y de laboratorio para el segundo semestre del ejercicio fiscal 2019.

Entre las más de 300 empresas que participaron estuvo Laboratorios Solfran S.A. pertenecientes a Carlos Lomelí.

Con ello, se puede decir que Andrés Manuel López Obrador no está acabando con la mafia del poder y lo que resulta más preocupante es que seis años no le sean suficientes para seguir beneficiando a sus empresarios favoritos, con acuerdos en lo oscurito.