COZUMEL, QRoo, 19 de mayo de 2019.- Un caso de presunto abuso sexual salió a la luz luego de que un grupo de ciudadanos denunció públicamente que las autoridades no han procedido conforme a ley.

Lo anterior, ya que el presunto responsable no fue puesto a disposición de las autoridades ministeriales a pesar de encontrarse tras las rejas en los separos de seguridad pública, en donde al parecer, solo permanecerá el tiempo que establece la ley por incurrir en una falta administrativa.

Esto provocó el enojo de los vecinos, quienes exigieron a las autoridades atraer el caso para que el presunto responsable fuera puesto a disposición del Ministerio Público y procedieran en consecuencia, ya que la propia víctima confirmó que su padrastro había abusado de ella.

Los denunciantes señalaron que el hecho ocurrió la noche del 16 de mayo, cuando la niña de 11 años se quedó a cuidar a sus hermanos menores ante la ausencia de su madre, quien se encontraba hospitalizada y en espera de ser intervenida quirúrgicamente, quedando bajo la supervisión del padrastro.

Lo anterior, fue aprovechado por el sujeto para abusar de la menor. El lamentable hecho fue confirmado por la hermana menor de la víctima, una niña de siete años de edad, quien con expresión de asombro, le contó a su vecina que su hermana estaba haciendo “cosas de adultos” en su casa.

Luego de aproximadamente 20 minutos, la presunta víctima se presentó a la casa de su vecina, quien dijo que efectivamente, la pareja de su mamá la había tocado sin que pudiera hacer nada para evitarlo.

La vecina de manera inmediata resguardó a ambas niñas en el domicilio, mientras pensaba que hacer para evitar que fuera nuevamente atacada por el sujeto.

Poco después de las 10 de la noche el padrastro de las menores regresó a su hogar y al no encontrarlas se dirigió al domicilio de la vecina que las tenía, quien no permitió que se fueran con él, argumentando que se encontraban cenando y que se quedarían un rato más; por lo que luego de que éste se retirara, decidió solicitar la presencia de la policía.

Finalmente, el presunto agresor fue puesto a disposición del juez cívico, aunque no como los denunciantes esperaban, pues se enteraron que permanecería tras las rejas, pero acusado de cometer una falta administrativa, por lo que acudieron a la representación local de la Fiscalía General del Estado para solicitar su intervención, aunque tampoco hicieron nada al respecto.

Las autoridades han mantenido total hermetismo, tanto en seguridad pública como en la fiscalía local, bajo el argumento de no tener información al respecto y que aun cuando tuvieran conocimiento y datos del caso, no podrían divulgar nada por tratarse de un asunto delicado.