Crisis sanitaria y política ahoga a Chetumal ante tanta basura

15 de marzo de 2019

9:08

Rafael Briseño/Quadratín Quintana Roo

OTHÓN P. BLANCO, 15 de marzo de 2019.- En medio de una crisis política ocasionada por la lucha de poder al interior de la comuna capitalina, entre regidores postulados por el partido Morena y los directores municipales, que han destacado por su desconocimiento de la administración pública, Chetumal se ahoga por la basura acumulada en sus calles, baches, desfondes y problemas de una inseguridad pública que va en aumento, principalmente en robos a casa habitación.
La sombra de los senadores José Luis Pech Varguez y Marybel Vilegas Canché se extiende por la comuna capitalina en su lucha de posicionarse con miras al relevo gubernamental de 2021.
Hernán Pastrana Pastrana alcanzó la presidencia municipal de Othón P. Blanco con una abrumadora mayoría en las elecciones de julio 2018, al abanderar la candidatura del partido Morena, en lo que se convirtió en su segundo periodo al frente del ayuntamiento capitalino tras su administración 1978-1981, postulado por el PRI.
Sin embargo, sus primeros traspiés surgieron en sus intentos por designar al secretario general del ayuntamiento, tesorero, contralor y directores de ingresos y egresos, los cuales fueron rechazados por la mayoría de los regidores morenistas asi como los de oposición y el independiente.
Luego de intenso debate y cabildeo cedió las principales posiciones en la administración pública municipal.
Aunque la crisis se agravó con su desmayo del 13 de noviembre de 2018, durante la puesta en marcha del programa de bacheo y reparación de desfondes, con recursos del gobierno estatal, en su momento Hernán Pastrana declaró que muy a su pesar tenia que recurrir al auxilio del Gobernador ante la difícil situación económica en la que recibió la comuna capitalina.
Las denuncias de nepotismo contra la octava regidora Rufina Cruz Martínez, por colocar a familiares en puestos clave, irregularidades en la Dirección de Catastro y por violencia de género en contra de la regidora –ahora independiente- María Hadad Castillo, por parte de los directores de Comunicación Social y de Recursos Humanos, fueron rebasadas por la incapacidad de atender el problema de la basura en las calles de Chetumal y, después, por la licencia definitiva que presentó para separarse del cargo por motivos de salud.
Tras una primera solicitud de licencia por 90 dias para separarse del cargo, Hernán Pastrana fue sustituido por el primer regidor José Luis Murrieta Bautista, que quedó como encargado del despacho, quien después entregó la estafeta a su suegro Othoniel Segovia Martinez en su calidad de suplente de la presidencia municipal.
Desde el inicio de la administración municipal de extracción morenista, la autoridad capitalina ha tenido que lidiar con el incumplimiento del contrato por parte de la empresa Intransiso, que desde 2010 firmó convenio para la concesión del tratamiento final de la basura y la instalación de una planta generadora de energía –con una inversión de 36 millones de dólares- y que hasta el momento no ha podido iniciar trabajos; posteriormente con la contratación de la empresa Amex Ecosolution, mediante el pago de ocho millones de pesos por ocho meses, en tanto logran solucionar el problema con la primera empresa.
A pesar de las irregularidades denunciadas por las regidoras María Hadad Castillo y Cinthia Millán Estrella, el entonces encargado del despacho de la presidencia José Luis Murrieta Bautista justificó la contratación de la empresa como un acto de urgente necesidad, pero negándose a proporcionar copia del contrato firmado a las solicitantes.
La empresa AMEX Ecosolution puso en servicio cinco de 10 camiones recolectores de basura comprometidos, en un intento por atender el servicio de recoja de basura aun cuando a decir del subsecretario de Medio Ambiente, no contaba con los permisos para proporcionar el servicio de recoja, tratamiento y disposición final de residuos sólidos.
De las cinco unidades a la fecha solamente funcionan cuatro, ya que por la mala calidad y condiciones uno de los camiones ha quedado fuera de servicio por la falta de refacciones.
A raíz del problema en la recoja de basura, el ayuntamiento conformó un comité interdisciplinario mediante el cual se pretende implementar una política para atender el manejo y disposición final de los residuos sólidos que se genera en la capital de Quintana Roo, ante los alarmantes niveles de sobre cupo y contaminación que presenta el relleno sanitario municipal.
Después de la cuarta reunión y como resultado de los informes solicitados, se detectó que por lo menos hay 368 viviendas construidas en un rango menor a los 500 metros del relleno sanitario, lo que implica una posible afectación a mil 472 habitantes de la colonia Americas III.
La regidora Cinthia Millán explicó que se analizarán las acciones legales por la violación a las disposiciones que prohíben construir viviendas en un rango de 500 metros del relleno sanitario.
Ante la crisis en la recoja de basura, el gobernador Carlos Joaquin Gonzalez confirmó que el estado entrará al quite de la autoridad municipal para atender el problema, ya que dijo “no se puede permitir que caiga la ciudad capital, sobre todo, después de la inversión que estamos realizando para la reparación de baches y desfondes en la ciudad”.
Aunque reconoció que se trata de un tema municipal, el mandatario dijo que el Gobierno del Estado analizará el contrato firmado con la empresa Intransiso porque hasta el momento no se ha visto la inversión anunciada y, mucho menos, la construcción de la planta generadora de energía por el procesamiento de la basura.
Dijo que los 42 millones de pesos solicitados por el presidente municipal, Otoniel Segovia Martínez más que para el servicio de la recoja de la basura son para responder al contrato firmado con la empresa Intransiso.
Mientras el gobierno del estado y el municipal tratan de llegar a acuerdos para atender la problemática y no dejar caer a la ciudad capital, la basura inunda las calles de las colonias de Chetumal en algo que se ha convertido, conforme pasan los días y no se resuelve, en una crisis política y sanitaria.