Invitan a infantes a crear arte efímero en Playa del Carmen
MÉRIDA, Yuc. 9 de junio de 2019.- Las mujeres que lucharon igual que los hombres para lograr avances en la transformación social han quedado fuera de la historia por actitudes misóginas que tienen que ver con el patriarcado impuesto durante la invasión y colonización de México, afirmó Georgina Rosado.
La investigadora yucateca además de ser pionera en los estudios sobre la perspectiva de género se ha dedicado a difundir el papel de las mujeres en la historia peninsular y fue también la primera en rescatar la historia de María Uicab, sacerdotisa y líder de los mayas masewales durante una de las etapas más álgidas y difíciles de la llamada Guerra de Castas iniciada en 1847.
En la Casa de la Cultura de Tulum se inauguró un mural del pintor regiomontano Fando Criez dedicado a la poco conocida dirigente religiosa y militar de los mayas masewales.
Entrevistada en relación a esa obra, Georgina Rosado dijo que no es suficiente dedicar un mural a la líder maya de la guerra, María Uicab, y tampoco se debe limitar el reconocimiento a su aporte para la creación del territorio de lo que es ahora Quintana Roo creando un museo.
Precisó que “definitivamente es un buen inicio en el camino visibilizar el papel de las mujeres en la rebelión indígena que inició en 1847 y en la construcción y mantenimiento de la nación de los crusoob/cruces en el territorio de lo que es actualmente el estado de Quintana Roo”.
Es fundamental incorporarla a la historia, ya que es un personaje histórico que no solo tuvo relevancia para Tulum, su centro ceremonial y político, sino para todo el área maya, ya que fue ella con sus ejércitos quien liberó a Chan Santa Cruz, actual Carrillo Puerto, del poder de quienes se aliaron con el gobierno yucateco y asesinaron a dirigentes mayas además de desconocer el poder de la Santísima Cruz que unificaba a los indígenas.
Indicó que después de la intervención militar de Maria Uicab, el poder religioso y la comunicación oracular con las deidades se trasladó a Tulum y los líderes militares que conformaban el triunvirato gobernante, Bonifacio Novelo, Crescencio Poor y Bernardino Cen, se sometieron a su autoridad.
La correspondencia encontrada en archivos comprueban también que fue ella quien, al morir Bonifacio Novelo, nombró a Bernardino como jefe de las fuerzas militares y después de él a Crescencio Poot. Es decir que contrario a lo que se cree, su poder no se suscribió a un centro ceremonial sino a toda la zona maya, concluyó.
Reproducción autorizada citando la fuente con el siguiente enlace Quadratín Quintana Roo.
Síguenos en Facebook, Twitter, Threads, WhatsApp, Telegram, TikTok, Instagram, YouTube