Filtros ineficaces, burlas y pusilanimidad estatal dañan Cancún

CANCÚN, QRoo, 15 de marzo de 2021.- Con la acusación del gobierno argentino de que 44 de sus turistas se contagiaron de Covid 19 en Cancún y la respuesta de algunos turisteros de Quintana Roo de que los argentinos ingresaron al Aeropuerto Internacional de Cancún contagiados, solo se muestra la ineficacia del protocolo en la terminal aérea.

La acusación primero del gobierno canadiense y luego del gobierno argentino pone a Cancún como un foco de infección a nivel internacional.

El presidente del Consejo Directivo de la Asociación de Hoteles de Cancún, Puerto Morelos e Isla Mujeres, Roberto Cintrón, afirmó este día que los centros de hospedaje tienen protocolos sanitarios impecables, pero eso de qué sirve si en el Aeropuerto Internacional de Cancún dejan pasar a enfermos asintomáticos con Covid 19 y las autoridades sanitarias estatales no imponen un eficaz protocolo sanitario a turistas o a aerolíneas. Sí se necesita que vengan visitantes, claro, pero no con simulaciones.

A la fecha siguen llegando spring breakers y el Gobierno de Quintana Roo no ha toma medidas ¿Será Estados Unidos el tercer país que nos denuncie internacionalmente?

Trascendió que en el hotel Moon Palace se hospedó un grupo de jóvenes argentinos que estuvieron en cuarentena al dar positivo a Covid 19 en pruebas PCR practicadas momentos antes de irse a Argentina.

Si 44 turistas llegaron contagiados a México se evidencia la falta de un filtro eficaz que lo detectará, porque es irrisorio pensar que de los 44, ninguno registró una temperatura mayor a 37 grados.

El director del Consejo de Promoción Turística de Quintana Roo, Darío Flota, considera que deberán establecerse nuevas restricciones, pero cuándo, ¿Cuando ya la mala fama que están haciendo a Cancún sea imposible de contrarrestar?

Con un “leri leri” infantil de parte de los turisteros de que no afectó las reservaciones no se soluciona algo, y sí se sigue poniendo en riesgo a los cancunenses que laboran en el sector turístico.

Y si la autoridad estatal no pone orden, cómo puede exigir a los turistas una corresponsabilidad que al parecer no existe ni en las plazas comerciales, ni en los supermercados ni en las discotecas, bueno, ni en el transporte público.

La pusilanimidad estatal que en primera instancia pareciera que ayuda a la urgente reactivación de los destinos de Quintana Roo, a la postre, de seguir esa inercia, hará que sus hermosos destinos lo paguen caro.

¡Y así quieren semáforo verde y abrir escuelas?

¡Já!

Reproducción autorizada citando la fuente con el siguiente enlace Quadratín Quintana Roo.

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