Metepec: el encanto del más pequeño Pueblo Mágico
CANCÚN, QRoo, 5 de enero de 2019.- El pequeño Emanuel, de seis años de edad, amaneció triste. La quemadura de segundo grado que provocó la explosión de pirotecnia en su pantalón, hace que sus lesionen le ardan. Con él, Lluvia Daraí, de cuatro años, pasa una recaída por su leucemia; a Silvia, de nueve años de edad, le duele la apendicectomía y Paula, de siete años, sufre una fractura de radio distal derecho.
Los pequeños convalecían, aburridos, junto a sus padres, como muchos otros que están internados en el Hospital General de Cancún, a unas horas de una fecha tan especial para los niños y las niñas, el 6 de enero, hasta que cuatro figuras llamaron poderosamente su atención.
No eran enfermeras, tampoco doctores que se acercaran a los pequeños pacientes para observarlos y evaluar su evolución: eran tres hombres elegantemente ataviados y con ellos, una mujer: ¡Son los cuatro Reyes Magos y traen juguetes!, fue un grito que llenó de alegría y ternura a Melchor, Gaspar y Baltazar, y conmovió visiblemente a Gloria Torruco de O´Farrill, la presidenta honoraria del DIF Benito Juárez.
Todo empezó muy temprano. Este cinco de enero de 2019, amaneció fresco en Cancún, pero eso no detuvo a los cuatro Reyes Magos que llegaron al nosocomio cargados de juguetes y cobijas.
Los vistosos trajes de los reyes que contrastaban con la sencillez de la reina causaron expectación y provocaron gran alegría desde su llegada.
Pequeños que esperaban ser atendidos en la sala del Hospital General Jesús Kumate, se contagiaron de la emoción y la alegría que venció la angustia de ser o tener a un enfermo, cuando empezaron a entregar los juguetes.
Los cuatro Reyes Magos llegaron a la Sala de Urgencias acompañados del doctor Carlos Arturo Barrera, quien les guió en su recorrido por las instalaciones de hospitalización pediátrica.
Bebitos, infantes y adolescentes recibieron primero con asombro y luego con gusto la visita de los Reyes Magos, visita que se realizó siguiendo todos los protocolos de seguridad del hospital, tanto en el área de Urgencias como en hospitalización y en los cubículos de aislamiento, donde desde lejos Melchor, Gaspar y Baltazar mandaron sus saludos y les dejaron el ansiado juguete.
No faltó el carrito, el caballo, la pelota, el peluche, los rompecabezas, los juegos de mesa y los didáticos, y mucho menos los coches a control remoto, uno de los cuales fue para Emanuel, quien primero se quejaba de sus ardores y luego narró a los cuatro Reyes Magos: Gloria, Melchor, Gaspar y Baltazar, con esa inocencia de tener seis años, cómo fue que sufrió las quemaduras de segundo grado.
El pequeño cancunense no solo dijo que aprendió la lección, contó todo lo “malo que había hecho” el año pasado y se comprometió a ser mejor en 2019.
El juguete que le regalaron borró mágicamente su cara de angustia y regresó su carita alegre, comentó su mamá.
Los Reyes Magos salieron conmovidos y motivados, siguieron repartiendo en las afueras del hospital cobijas, ahora a los niños grandes, que les será de gran ayuda para pasar el frío.
Los juguetes fueron donados por el Patronato y el personal del DIF Benito Juárez, en un esfuerzo conjunto por fomentar tradiciones, sembrar valores y seguir uniendo familias, en beneficio de todos los cancunenses.
Reproducción autorizada citando la fuente con el siguiente enlace Quadratín Quintana Roo.
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