Piden a diputados dejar de ser gastalones

27 de septiembre de 2019

14:00

Lilian Castro/Quadratín Quintana Roo

CANCÚN, QRoo, 27 de septiembre de 2019.- Con un presupuesto de casi 469 millones de pesos para 2019, la XVI Legislatura tiene como reto apegarse a sus funciones y eliminar el gasto en ayudas sociales, así como planear mejor su presupuesto y no gastar más de lo planeado.

Al menos así lo plantea el Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO) en su análisis 2019 sobre los congresos del país, con lo cual coincide el Observatorio Legislativo de Quintana Roo, luego de que la anterior legislatura se convirtiera en 2018 en la más costosa del país para un universo de población de 1.5 a tres millones de habitantes, mientras el de Yucatán fue el menos costoso.

El presidente del Observatorio, Eduardo Galaviz Ibarra, indica que el análisis del IMCO solo confirma los datos que reiteradamente señaló el organismo a su cargo en las observaciones presentadas en los últimos años, por lo que ahora el IMCO propone que el ejercicio del gasto de los congresos se haga con parámetros claros de actuación, apegados a la legalidad, austeridad y transparencia.

Además, destaca que el informe del IMCO revela la persistencia de las sedesoles legislativas, en la que los congresos locales destinaron 12 por ciento de su gasto a ayudas sociales para las cuales no tienen atribuciones legales, cuyo monto en el caso de la XV Legislatura superó los 100 millones de pesos, cuando los recursos públicos deben garantizar una atención a las verdades prioridades sociales.