
Grandes Pymes
Inseguridad y bailecito
CANCÚN, QRoo, 14 de diciembre de 2018.- Mientras la ola de violencia se ha vuelto imparable en Quintana Roo y principalmente en Cancún, donde la cantidad de asesinatos aumenta cada día más, al grado de que ya rebasan los 520 este año, el secretario estatal de Seguridad Pública, Jesús Alberto Capella, se divierte de posada en posada y el vox pópuli es que no se ve el resultado de su trabajo y mucho menos del llamado Mando Único.
Lo cierto es que en las calles, los quintanarroenses se sienten inseguros, lo que se agrava con la creciente psicosis por los recientes asesinatos y desaparición de mujeres en Cancún, como el caso de la joven Cindy, de quien se cumple ya una semana de que se desconoce su paradero y ni el llamado Rambo de Morelos, ni el flamante Secretario de Seguridad Pública de Cancún, Jesús Pérez Abarca, han salido a comentar algo al respecto.
Pero sí se dan el tiempo y el lujo de asistir a los convivios con motivo de las fiestas decembrinas, tanto que al propio Jesús Alberto Capella se le vio muy divertido en la posada de medios de comunicación que ofreció el gobernador Carlos Joaquín González, departiendo con los periodistas y haciendo relaciones públicas, como si eso fuera suficiente para dar una solución real al incremento de la violencia y el número de ejecuciones, que ya a estas alturas superan en mucho los 227 que se registraron el año pasado.
Y hablando del escenario de inseguridad, tampoco la alcaldesa de Benito Juárez, Mara Lezama, ha podido salir del paso de las críticas y mucho menos, en su calidad de mujer, ha sabido encabezar el reclamo social que demanda un esclarecimiento de los feminicidios que han consternado a la población de Cancún, sobre todo después de que en esta semana se descubrió el cuerpo descuartizado de una mujer decapitada en la Región 101 y justamente este 13 de diciembre fue encontrado otro cuerpo ensabanado de una fémina en la colonia El Trébol.
Sin duda, el comentario generalizado es que a la Presidenta Municipal y a su partido Morena, le ha quedado grande la silla en el Ayuntamiento, pues ni su trayectoria como comunicóloga le ha permitido sortear las críticas, ni mucho menos puede escudarse de que entregó el control de la Policía Municipal al Gobierno del Estado con el pretexto del Mando Único. Lo que sí ha hecho, es aprovechar los reflectores y el tema de los feminicidios para ir a solicitar más recursos al Congreso de la Unión y al Gobierno Federal, con el pretexto de que Cancún merece más atención social.
Contrario a lo esperado, los operativos de la Secretaría Municipal de Seguridad Pública se han concentrado en atrapar a delincuentes menores o infractores de faltas administrativas, tal es el caso de la reciente detención de vendedores de juegos pirotécnicos, ambulantes o conductores alcoholizados, aunque a la fecha la policía no ha acertado en detener a ningún involucrado con asesinatos, asaltos o balaceras, pues además los elementos llegan tarde al llamado de auxilio de la ciudadanía y cuando los que cometen los crímenes ya se dieron a la fuga.
Otra de las pifias de la semana es que ahora siempre sí el Ayuntamiento de Benito Juárez no puede hacer nada para frenar la ampliación a 10 años de las empresas concesionarias del transporte público en Cancún, que concedió el Cabildo en la anterior administración que encabezó Remberto Estrada Barba, quien aunque el alcalde votó en contra, dio línea para que sus regidores mayoritearan la propuesta de conceder el aplazamiento a las mismas cuatro compañías.
Y es que, aunque al principio la actual administración municipal informó que intentaría echar para atrás dicho acuerdo, lo cierto es que el secretario general del Ayuntamiento, Jorge Aguilar Osorio, ya admitió que existe un amparo en favor de Maya Caribe, con lo cual sería imposible que prosperara la petición del Cabildo para revocar dicha ampliación, lo cual ya era bola cantada.
De esta manera, junto con Autocar, Turicún y Cooperativa Bonfil, las concesionarias se aprestan a seguir dando el servicio en Cancún durante la siguiente década, a pesar de las quejas y el rechazo de los usuarios por la mala atención y la inseguridad de las unidades.
Sin embargo, tal decisión de la Comuna de Benito Juárez era de esperarse, pues una vez más entran en juego los acuerdos en los oscurito, porque sería inentendible que Aguilar Osorio pudiera arruinarle el negocio a uno de sus amigos y correligionarios del PRD, Alejandro Noya, ex regidor y actual consejero del Sol Azteca, y quien curiosamente es hijo del propietario de Turicún, Vicente Noya Cruz, de quien se sabe fue uno de los que habría operado por debajo de la mesa la ampliación de la concesión.
Reproducción autorizada citando la fuente con el siguiente enlace Quadratín Quintana Roo.
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