Cuida Diego Castañón salud de hombres
PLAYA DEL CARMEN, QRoo, 4 de octubre de 2019.- El desmedido y desregulado crecimiento de ambulantes en la famosa Quinta Avenida de Playa del Carmen no solo afecta la economía de los comerciantes que pagan impuestos federales, estatales y municipales, ha convertido a la calle más importante de México en una larga zona de hacinamiento en detrimento de la imagen del destino.
Ante la ineficacia de las autoridades de comercio en vía pública, ya se instalaron hasta jugueros que con su lixiviado de naranjas, llenan de basura y moscas la zonas donde expenden el jugo, manchando además, el pavimento.
Hay venta de jugos, tacos, dulces, cigarros, frituras, antojitos, que aunados a los turisteros ambulantes no sólo tapan a los comerciantes formales, saturan de publicidades y ofrecimientos a turistas y locales que confunden con visitantes.
Pero eso no es todo, los pleitos por los espacios y los lugares se observan a diario, así como la creciente ola de plumeros que hábilmente roban carteras y celulares a los turistas que recorren la Quinta Avenida.
Botes de basura atestados de desechos, basura en el suelo, gritos de ofertantes y rozones a las bolsas de los visitantes, que además no tienen suficientes lugares de descanso ni parasoles muestra crisis en la zona.
Los ambulantes insisten, insisten, acosan y hasta le mientan la madre a los extranjeros que no les compran, pensando que no entienden sus expresiones.
En los últimos meses han pululando ambulantes y módulos de tours en una avenida que ante la complacencia del Ayuntamiento se ha vuelto anárquica y peligrosa porque a la vista del turismo ha habido asesinados y heridos.
“Dicen que todo se arreglará cuando reubiquen a los ambulantes, y ¿Mientras?”, se queja un comerciante establecido quien afirma que reportan pérdidas, pero que eso no importa a los inspectores municipales ni a los del SAT.
“Cuando quitamos a los ambulantes, les vale, nos sacan copias de sus permisos municipales y ya nos cansamos de pelear, es un cochinero”, denuncia.
Muchos ambulantes que saturan la zona han pagado, dice, un permiso al Ayuntamiento de Solidaridad por 250 pesos, según recibos oficiales de la Tesorería municipal de la actual administración de Laura Beristain.
La avenida turística debraya en un hacinado tianguis en el que, comentan los comerciantes formales de los que se omiten los nombres porque temen represalias, y agregan que “no existe voluntad política del Gobierno de Solidaridad, para aplicar el Reglamento de Comercio en la Vía Pública”.
Lamentan que la avenida turística más importante de Playa del Carmen esté en decadencia.
Ante ello y de forma respetuosa, reiteraron su petición a la alcaldesa Laura Beristain para que cumpla con “orden y esperanza” a los empresarios que trabajan e invierten desde hace años en la zona y retire “esa contaminación ambiental, visual y auditiva” del ambulantaje.
La Quinta Avenida es el ícono y corazón turístico de la Riviera Maya y la columna vertebral del comercio establecido, factor determinante para el éxito económico que registra el municipio de Solidaridad.
“Solo hay dos Quinta Avenida”, refirió una vez, Laura Beristain, presidenta municipal de Solidaridad al incluir a la de Nueva York y enfatizó que “de la nuestra… estamos orgullosos”.
La avenida es conocida internacionalmente y mide aproximadamente cuatro kilómetros.
Alberga infinidad de negocios como La Parrilla, Tropical, El Sur, Jarry’s, Achiote, Chess Celine, A’Cacao, Cenacolo, La Cueva del Chango, La Casona y El Pez Vela.
Para los habitantes de Playa del Carmen es generadora de empleos y propinas.
El Consejo Coordinador Empresarial de la Riviera Maya estima que unos 20 mil turistas recorren a diario la Quinta Avenida, aunque en toda una temporada alta pueden ser entre 1.5 millones y dos millones los que la visitan.
Reproducción autorizada citando la fuente con el siguiente enlace Quadratín Quintana Roo.
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