Seca a La Rama delincuencia en Quintana Roo

PUERTO MORELOS, QRoo, 16 de diciembre de 2021.- Doña Ofelia llegó a Quintana Roo en el 2000, procedente de Ciudad de México.

Todos los días desde el 16 de diciembre oía vocecitas que cantaban atrás de su puerta:

“Cantaban algo que no entendía muy rápido y se marchaban”, nos cuenta.

Como siempre llegaban a la misma hora, llena de curiosidad les esperó y abrió su puerta.

Eran pequeños de entre cuatro y once años que cantaban y cargaban una rama adornada con motivos navideños.

“Ya se fue la rama, muy decepcionada, porque en esta casa no le dieron nada”, le cantaban marchándose.

“Es La Rama”, le dijo en ese entonces, sonriendo, una vecina, al ver su cara de sorpresa…

La Rama es una tradicional canción mexicana de Navidad, cuyo origen se desconoce, pero ha acompañado al pueblo de Veracruz por más de 500 años, pues sirvió a los misioneros como herramienta de evangelización.

“Se cree que los antecedentes de esta tradición tienen su origen en la época de la Colonia, cuando los misioneros españoles empezaron a evangelizar”, señala la Arquidiócesis de Xalapa.

Los indígenas de la región celebraban una fiesta de renovación de la naturaleza, cuyo elemento principal era una rama llamada versúchil.

Las fechas de su celebración coincidían con el Adviento y la Navidad del calendario cristiano, por lo que fue la ocasión propicia para que los misioneros españoles establecieran los primeros vínculos entre las tradiciones indígenas y la religión católica, de esta manera surgió esta tradicional canción.

Poco a poco se le fueron añadiendo elementos de las tradiciones afroamericanas, como el uso de música, ritmos y bailes, aportaciones hechas principalmente por los esclavos traídos por los españoles a las llanuras de Sotavento, Cuenca del Papaloapan y Los Tuxtlas.

“Naranjas y limas, limas y limones, más linda es la Virgen que todas las flores”, dice la primera estrofa de La Rama, que casi no cantan los niños.

En la tradición veracruzana se canta por las calles durante las Posadas, es decir, del 16 al 24 de diciembre, aunque en algunas regiones se prolonga hasta el 6 de enero, Fiesta de la Epifanía, y en otras hasta el 2 de febrero, Día de la Candelaria.

Se ha extendido a Campeche, Yucatán y Quintana Roo, donde van de casa en casa para que les den dulces y fruta de colación o dinero, que se reparten al final del recorrido.

En Tabasco y Chiapas se conoce como Aguinaldos.

Usan la rama que encuentran porque en Quintana Roo casi no hay pinos.

Desgraciadamente, ante la ola de delincuencia y ataques en moto, sobre todo en zonas populares, ya casi no hay grupitos de peques cantando La Rama solos por las calles.

“Ya no nos dejan salir, que por el Covid y que por la delincuencia ni a jugar ni a pedir Rama”, lamenta Diego, de 10 años de edad, y quien dice orgulloso que “era cantante de Rama desde los 4 años”.

Doña Ofelia extraña abrir su puerta, dar “de a cinco, dulces, jícamas y mandarinas” y escuchar…

“Ya se va La Rama muy agradecida porque en esta casa fue bien recibida”.

Reproducción autorizada citando la fuente con el siguiente enlace Quadratín Quintana Roo.

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