CANCÚN, QRoo, 10 de julio de 2018.- Al conocer las modificaciones a la ley de movilidad de Quintana Roo, el representante de UBER en México, Federico Ranero, afirmó que es inadmisible que la oferta de transporte en Quintana Roo siga secuestrada por grupos de poder, que lograron darle vuelta a una reforma que fue un gran paso del Ejecutivo estatal.
“Tristemente se retrocedió y se dio un paso atrás a la modernización del sistema”, externó.
Indicó que “lo más oscuro de la política retrógrada y proteccionista está detrás de las reformas a la ley de movilidad” cuyos cambios fueron a modo de los taxistas.
El principal motivo por el que Uber no regresaría a Quintana Roo es porque las modificaciones que se plantearon establecen que para que estas plataformas digitales puedan operar deberán de tener concesiones y no permisos, lamentó.
Sin embrago, dijo que analizan someter el caso a la Comisión Federal de Competencia Económica (Cofece) y a la Suprema Corte de Justicia de la Nación.
“La Cofece, en un análisis de 2015, invita a todos las entidades y sus gobernadores a privilegiar la competencia y la libre concurrencia de estos actores de nueva movilidad como empresa de redes de transporte. Se les recomienda que sus marcos normativos, eviten en primer lugar, el obtener una autorización o registro que pudiera imponer requisitos adicionales como placas especiales, cromáticas específicas, como particularmente es una concesión tal cual, lo cual podría limitar el número de unidades funcionando y prohibir la flexibilidad sobre la cual se basa la economía colaborativa”, dijo finalmente