Universo Pyme

Dejémonos de tarugadas.

Atrevámonos a pensar y a actuar con responsabilidad histórica. Lo hicieron países asiáticos como Japón en la posguerra luego de haber experimentado uno de los traumas más dramáticos en la historia de la humanidad. Lo hicieron los Coreanos luego de la guerra que experimentaron en la década de los años cincuenta en el siglo pasado.

Veamos ahora en dónde se encuentran, su grado de educación, los compromisos que adquieren para sus generaciones futuras. Veamos incluso sus problemáticas para evitar repetirlas, pero ambas naciones, supieron ver más allá de sus narices y prepararse para ejercer una enorme transformación que ha beneficiado a sus habitantes. Simplemente actualmente el Japón comienza a educar a sus habitantes para ser buenos ciudadanos del mundo. Nosotros queremos convertir a las nuevas generaciones en expertas en el manejo de las asambleas.

México lo puede hacer. Lo tiene que hacer para no caer en la fácil tentación de convertirnos en una nación de jodidos en donde el gobierno se mantiene en pie gracias a que administra las dádivas a quienes son incapaces de salir de la pobreza. Rompamos con la idea de que México tendrá que ser un país pobre o más bien ser un pobre país.

Las condiciones básicas y los recursos para reconvertir a esta nación en una gran nación con capacidad de ser de las naciones con mejores presentes y futuros están sobre la mesa y han llegado ahí prácticamente de manera gratuita. Tenemos los recursos suficientes y el potencial humano que se requiere.

Nos han invitado a participar en la reconquista de la soberanía del bloque norteamericano en la materia de producción de micro componentes que están destinados a ser los esenciales para el futuro de la humanidad. Pocos elementos en el mundo podrán funcionar bien sin alguno de estos pequeños chips que desempeñen una labor básica del producto.

De entrada Estados Unidos pone sobre su mesa una inversión de 50 mil millones de dólares para que esa pelota comience a rodar. Aparte está por supuesto la reconversión energética de la humanidad que pretende liderear Estados Unidos para convertir a la región del Norte de América en la que primero y con mayor agresividad reconvierta sus instalaciones y la venta de su planta vehicular pública y privada, en una exclusivamente eléctrica para abandonar el uso de combustibles fósiles.

No nos damos cuenta pero ese reto, tan solo en el territorio del norte de nuestras fronteras comprende necesidades de inversión de trillones de dólares americanos. Desde baterías para autos, hasta centros de carga públicos y una red de centros de innovación que exigirán cada día mejor capacitación a trabajadores y la producción de talento para empresas y centros de investigación.

Queremos ya desde ahora ser un punto de producción cercano a donde las necesidades exigen satisfacción a ellas. El nearshoring es una necesidad nueva que nos cayó del cielo luego de que la pandemia nos marcara las áreas de oportunidad de la economía global.

Para todo ello, y en la perspectiva de que aprovechemos estas y varias oportunidades más, tenemos que planear nuestro futuro y marcar las directrices estratégicas a las que correspondan planes de gobierno y compromisos de los diversos sectores productivos y académicos del país.

Marcar nuestras necesidades y conformar, para ejercerlos a partir del año 2025 los planes de Gobierno y los programas que necesitaremos para hacer del sueño del México del 2075 una realidad.

Seguro en lo fundamental todos estaremos totalmente de acuerdo, y espero que no queramos convertirnos en una nación con pobres que ansían los fines de mes para tener el dinero que requieren para medio atender sus necesidades básicas y que comprometen su voto para agradecer las dadivas que el mesías les otorga.

Atrevámonos a planear el México del año 2075.

Reproducción autorizada citando la fuente con el siguiente enlace Quadratín Quintana Roo

Síguenos en Facebook, Twitter, WhatsApp, Telegram y TikTok

Reproducción autorizada citando la fuente con el siguiente enlace Quadratín Quintana Roo.

Síguenos en Facebook,  Twitter,  Threads,  WhatsApp,  Telegram,  TikTok,  Instagram,  YouTube