El fin del INE o la reforma que se asoma
El Presidente va por más reformas estructurales.
Claudia tendrá ahí la guía para llevarlas a cabo. Lo que querrá Andrés Manuel López Obrador es que su pupila tenga mayoría absoluta en las cámaras legislativas para que lo que él ha marcado como el camino a seguir se siga.
El mandatario cree ciegamente que Claudia Sheinbaum será ganadora pero desea que sus seguidores entiendan que su voto es necesario para conseguir el carro completo en el Senado y en la Cámara de Diputados y culpará a los enemigos del pueblo el que no proceda, por ejemplo, la pensión con cantidades iguales al último salario, una tasa de reemplazo (como técnicamente se le conoce) que ni Dinamarca ha conseguido.
El actual Presidente de México culpará a la mafia del poder y sus incondicionales en el Congreso de impedir que el pueblo tenga lo que justificadamente merece y hará la invitación a que voten por quien le suceda y sobre todo por todos los puestos en favor de los candidatos de la 4T para que se alcance el paraíso.
El Presidente pone deliciosas piezas de pan frente al pueblo para ejemplificar, en su momento, que son los intereses opuestos a las grandes mayorías los que al través de sus legisladores impiden que las cosas se concreten.
Aunque una pensión con la misma cantidad que el trabajador percibía en activo durante su último trabajo no lo tenga ni Dinamarca.
El Presidente quiere una derrota en el Congreso para demostrar que necesita un carro completo en la elección de este año para que no haya nada que nos impida caminar hacia el paraíso.
Pero el tema, puesto sobre la mesa por el mandatario, permite hacer conciencia de que en México no hemos avanzado en un tema fundamental en términos sociales y de las finanzas públicas.
Habrá en México alrededor de 2 mil 500 sistemas de pensiones que no se ven, que no están coordinados entre ellos y que representan un compromiso actual de 120 por ciento del PIB.
No sería tan importante el dar una tasa de reemplazo de 100 por ciento a los pensionados como el coordinar todo ese compromiso adquirido ya. Sería más importante hacer un esfuerzo para que los trabajadores independientes o los informales aporten para su futura pensión y que no haya traslape entre los sistemas, que haya coordinación.
Es posible que sea mucho más efectivo contar con un buen sistema de salud que atienda a un pensionado que el que éste reciba una maravillosa pensión que a la hora de un problema de salud de todas maneras le resulta insuficiente para pagar un médico privado que le resuelva su asunto.
El tema es que cada vez que al Presidente se le ocurren cosas abre expedientes que nos permiten reconocer que los pendientes en salud, en educación, en pensiones, en justicia, en atención a discapacitados, de finanzas públicas, de infraestructura, de Pemex y en varios temas más exigen o pudieran ser adecuadamente atendidos solo si conseguimos articular una reforma hacendaria que al menos, aporte ingresos cercanos del 8 o 10 por ciento del PIB porque si no lo hacemos no vamos a conseguir avances en nada.
Cada idea iluminada trae en su análisis concluir que el gobierno, lo conduzca quien lo conduzca, requiere de más dinero que solo podrá obtenerse mediante una Reforma Fiscal en serio.
Y no estoy seguro cuánto estamos dispuestos los partidos políticos y los y las mexicanas a pagar más impuestos para que toooodos esos expedientes abiertos queden cerrados y debidamente atendidos.
Reproducción autorizada citando la fuente con el siguiente enlace Quadratín Quintana Roo.
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