Visión financiera/Georgina Howard
Nuevo León y la necesidad de un combustible más limpio
El problema de la contaminación atmosférica en Nuevo León no es una novedad, pero cada invierno se agudiza hasta niveles alarmantes. Ahora, la Secretaría de Medio Ambiente estatal, encabezada por Alfonso Martínez Muñoz, busca dar un paso hacia su solución al solicitar formalmente a la Comisión Reguladora de Energía (CRE) y a la Secretaría de Energía que incluyan a Nuevo León en los cambios a la norma que regula la calidad del combustible en México.
Actualmente, la gasolina distribuida en el estado es de menor calidad en comparación con la que se comercializa en ciudades como Ciudad de México y Guadalajara. Esto no es un simple problema técnico: tiene un impacto directo en la calidad del aire que respiran los habitantes del área metropolitana de Monterrey.
Según un estudio realizado en 2021 por el Observatorio Ciudadano de la Calidad del Aire, la gasolina en Nuevo León emite un 154 por ciento más de compuestos orgánicos volátiles (COV) por litro que las disponibles en dichas ciudades.
Los COV son precursores de contaminantes secundarios como el ozono y las partículas PM2.5, que representan una grave amenaza para la salud pública. Estas partículas, debido a su diminuto tamaño, pueden ingresar al torrente sanguíneo y generar enfermedades respiratorias y cardiovasculares severas.
Además, la volatilidad de los combustibles en Nuevo León intensifica la propagación de estos compuestos, especialmente durante la temporada invernal, cuando las condiciones atmosféricas favorecen la acumulación de contaminantes.
La gestión anunciada por Martínez Muñoz no es nueva. Durante años, asociaciones civiles, legisladores y gobiernos locales han insistido en la necesidad de mejorar la calidad del combustible para mitigar la crisis ambiental que enfrenta la región.
Sin embargo, el avance ha sido limitado, mientras la población sigue expuesta a niveles de contaminación que superan los estándares recomendados por organizaciones internacionales.
El hecho de que una de las ciudades más importantes del país dependa de combustibles de menor calidad no tiene una justificación lógica ni técnica. Nuevo León, con su peso económico e industrial, no debería estar rezagado en el acceso a hidrocarburos más limpios.
Esto no solo es una cuestión ambiental, sino también de equidad. La diferencia en las especificaciones del combustible entre entidades evidencia un trato desigual que impacta directamente en la salud y calidad de vida de los habitantes del estado.
Mientras se espera una respuesta del gobierno federal, las consecuencias de la inacción se siguen acumulando. El Observatorio Ciudadano de la Calidad del Aire destacó que en invierno las emisiones contaminantes de la gasolina en Monterrey son un 153.8 por ciento mayores que las de Ciudad de México y Guadalajara. Incluso en verano, esta diferencia persiste con un 77.6 por ciento más emisiones.
Estas cifras deberían ser suficientes para acelerar una revisión normativa que permita al estado acceder a combustibles más limpios y sostenibles.
El anuncio de la Secretaría de Medio Ambiente es un primer paso, pero no puede quedarse ahí. La situación requiere no solo de voluntad política, sino de acciones concretas y coordinadas entre los diferentes niveles de gobierno. La salud de los neoloneses depende de ello.
*** Proceso de Óscar Herrejón bajo la lupa
TOME NOTA *** El caso del empresario Óscar Herrejón Caballero, quien llega a México en extradición acusado de violación, se ha convertido en un punto de inflexión para el sistema judicial mexiquense.
Dos de las víctimas han alzado la voz a través de una carta, exigiendo que los procesos se conduzcan con imparcialidad y lejos de intereses que puedan entorpecer el acceso a la justicia.
La preocupación inicial recae en el juez Emmanuel Ruíz Albarrán, quien concedió la liberación del banquero en abril pasado y que hoy volverá estar al frente de la audiencia inicial.
Todo esto mientras las afectadas solicitan acabar con el tráfico de influencias dentro del Poder Judicial del Edomex y evitar la injerencia de personajes como Alejandro Moreno, líder del PRI, cuya influencia, aseguran, ha servido para proteger a Herrejón, proyectando de manera involuntaria el mensaje de que el poder económico y político pesa más que la búsqueda de la verdad. El camino para las autoridades hoy es claro: no hay espacio para la impunidad.
Reproducción autorizada citando la fuente con el siguiente enlace Quadratín Quintana Roo.
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