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Toma y daca de la relación México-Estados Unidos
Sana tus heridas
“Pararse, calmarse y descansar son las condiciones previas para curarse. Cuando los animales salvajes resultan heridos, buscan un lugar para descansar completamente, durante muchos días…
“Simplemente descansan, y de esa forma consiguen la curación que necesitan”
Thich Nhat Hanh
Con frecuencia dejamos a un lado las heridas emocionales pensando que el tiempo las cura y no nos afectara nuestro día a día.
Las heridas de amor, heridas del alma, heridas del pasado, heridas abiertas, todas estas heridas debes de sanarlas, porque tu felicidad y bienestar depende de ello.
Cuando uno recibe una herida, esa herida necesita descanso para poder curarse.
Lo mismo sucede con nuestra alma.
Si hurgamos en nuestra herida, si insistimos en ese dolor, enredándonos en las opiniones ajenas, no le concederemos el tiempo necesario para que se cure.
Si fuiste herido, acéptalo.
Siente el daño, sé consciente. Déjalo curar. Tal vez sea mejor que no hables con esa persona durante un tiempo.
Tal vez necesitas dejar ir esa relación.
Tal vez necesitas simplemente un poco de tranquilidad.
Sea cual fuere la respuesta, encuentra un lugar seguro y permite que se produzca tu curación.
Si estás sufriendo, sé consciente de ello, siente el dolor y después deja de hurgar en la herida.
Descansa.
Deja de luchar.
Relájate.
Da a tus heridas un tiempo suficiente para que puedan curarse.
“He aprendido que debo tener cuidado con las palabras que decido decir cuando estoy enojado porque después, esas palabras siempre dejan una gran herida de arrepentimiento en mi corazón, además de herir a los seres queridos”.
¡Esas heridas no se pueden curar!, dice Nino Varsimashvili.
¡Bendecido inicio de semana!
Reproducción autorizada citando la fuente con el siguiente enlace Quadratín Quintana Roo.
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