Destacan necesidad de educar con perspectiva de igualdad

20 de abril de 2019

21:20

Silvia Rojas/Quadratín Quintana Roo

CANCÚN, QRoo, 20 de abril de 2019.- De acuerdo con datos oficiales aportados por la secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero, durante la presentación del Plan de Acciones Emergentes para Garantizar la Integridad, la Seguridad y la Vida de las Mujeres y las Niñas en México, en 2018 se registraron tres mil 580 casos de mujeres asesinadas.
La investigadora, feminista y activista, María Salguero Bañuelos, en noviembre pasado, expuso en el marco de la jornada 16 Días de Activismo en Derechos Humanos, que habían sido asesinadas en México, mil 751 mujeres, y solo 554 casos, se reconocieron como feminicidios. Datos que equivalían a privar de la vida a 9.48 mujeres, diariamente, superando así el tope de nueve asesinatos por día, dado a conocer por la Organización de las Naciones Unidas (ONU).
El informe de la Secretaria de Gobernación por desgracia es aún más revelador: ofrece cifras que no parecen maquilladas y nos hacen pensar en una genuina preocupación del Gobierno de México por atender esta tragedia humana.
La cantidad de víctimas fatales dimensiona la magnitud de la situación, considerada como un problema de Estado y demanda, de manera urgente, la prevención, atención, sanción y erradicación de la violencia contra las mujeres y las niñas.
“Tenemos fe en que se pueda catalizar la sensibilización de la sociedad mexicana frente a la violencia de género y que las acciones de prevención se redoblen”, manifestó Leticia María Cauich Can, integrante del Colectivo Activistas Cancún.
Profesora de oficio, destacó la importancia de un principio fundamental para impulsar la equidad de género y eliminar la violencia: “el reconocimiento de que todos los seres humanos nacemos libres e iguales”. En tal contexto, es prioritario educar con perspectiva de igualdad, señaló.
“Debemos brindar a la sociedad los elementos y la información que fortalezcan la igualdad, el respeto y la tolerancia para lograr erradicar la violencia de género de nuestros pueblos”.
La violencia no debe existir y para ello debemos denunciar y señalar de manera clara las condiciones que la hacen posible.
En una palabra “quitarle el manto que la cubre y exhibirla frente a la sociedad”, recalcó.
Matrimonio infantil
La activista enfatizó que es necesario avanzar con pasos firmes y acciones legales estratégicas, que allanen el camino para garantizar el derecho de las mujeres y las niñas a una vida libre de violencia.
Indicó que un hecho relevante es el dictamen que aprobó, en febrero pasado, la Comisión de Justicia de la Cámara de Diputados, el cual prohíbe el matrimonio infantil y elimina las dispensas para reducir la edad de contraerlo.
No se puede y no se debe permitir que los usos y costumbres que prevalecen en algunas comunidades de nuestro país, obliguen a las niñas a contraer matrimonio, tal como ocurre con mayor relevancia en la India, sostuvo.
Expuso que una niña que se ve impedida de disfrutar su etapa juvenil y es obligada a asumir una obligación de esposa, se le coloca en una situación de violencia que pone en riesgo su desarrollo y vida misma.
Si bien es importante que se legisle en la materia, también es muy necesario que se difundan y se reconozcan, por parte del conglomerado social, los derechos de las niñas y los niños para lograr que se impulse una nueva cultura en la que prive el respeto y la salvaguarda de los derechos de la infancia y su interés superior, señaló la educadora.
Por su parte, el director del Registro Civil del municipio Benito Juárez, Juan Carlos Aké Patricio, indicó que en Quintana Roo desde 2009 el Código Civil del Estado, prohíbe el matrimonio infantil para proteger los derechos de las niñas y adolescentes:
“Solo permite el matrimonio a los contrayentes que sean mayores de edad, es decir, que cuenten con 18 años cumplidos”.
Aunque la ley prevé que para realizarse estas uniones debe contarse con la mayoría de edad de los contrayentes, se establecían dispensas a partir del otorgamiento del permiso de los padres o por mandato judicial, señaló.
De acuerdo con información disponible se derogan los artículos 149, 150, 151, 152 y 155 del Código Civil Federal, relativos a las dispensas en las que se encuentran el consentimiento de los padres o de los tutores y el permiso de las autoridades y de los tribunales superiores.
La ley vigente en Quintana Roo ha sido importante para que se inhiba de manera formal esta nociva práctica y las dispensas relativas; desafortunadamente continúan dándose uniones informales, de menores.
En el municipio Benito Juárez, en 2018 se registraron cuatro mil 425 matrimonios y ninguna solicitud de unión de menores de edad, informó el funcionario.
La Organización de las Naciones Unidas (ONU) considera que el matrimonio infantil es una grave violación a los derechos de la infancia.
“Conforme a la Ley General de Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes y a los tratados internacionales de derechos humanos, la ONU exhortó a los estados para que se eliminen las excepciones que permiten el matrimonio infantil, toda vez que facilitan la persistencia de prácticas que violan los derechos de la infancia, particularmente los de las adolescentes y niña en situación de mayor vulnerabilidad”.
De acuerdo con los datos más recientes de la Encuesta Nacional de la Dinámica Demográfica (ENAID) 2014, levantada directamente en los hogares, 23.75 por ciento de las mujeres de entre 15 y 54 años de edad contrajeron matrimonio antes de los 18 años.
En 2015, del total de matrimonios registrados de menores de 15 años, 98.4 por ciento fueron de niñas y adolescentes mujeres.
Hasta hace poco, el artículo 148 del Código Civil Federal permitía el matrimonio desde los 14 años de edad, en el caso de las adolescentes y 16 para los adolescentes. Dejando de lado la grave violación de los derechos de las niñas, los niños y las adolescentes.