Visión financiera/Georgina Howard
De Políticos y Quadratines
CANCÚN, QRoo, 1 de septiembre de 2019.- En el informe del presidente Andrés Manuel López Obrador no hubo nada nuevo.
Solamente repitió lo mismo de cada conferencia mañanera.
Siguen siendo la seguridad, salud y crecimiento económico sus grandes pendientes.
Pese a decir que debe terminar la complicidad de autoridades con la delincuencia, aseguró también nuevamente que no habrá guerra de exterminio contra el narco.
Como en sus acostumbradas conferencias, al hablar de seguridad para nada mencionó el grave problema de feminicidios.
Su discurso fue un alegato moral de autocomplacencia y ficción, pues habló de intenciones, de lo que se hará, afirmando que la mayoría de los mexicanos son felices.
No importa al Presidente que no haya crecimiento económico, mientras exista bienestar y felicidad. Como si la productividad nada tuviera que ver con dar bienestar.
Se dijo satiafecho de nuestra economía al mencionar las remesas que envían mexicanos migrantes.
Festejó la obtención de medallas en juegos Panamericanos y Parapanamericanos cuando no pudo apoyar a los atletas mexicanos.
Sin duda, un país imaginario, el de Mejicolandia, donde abundan las buenas intenciones cada mañana.
Su discurso fue benévolo y favorable a empresarios.
Dijo que gran parte de las familias reciben ya apoyos cuando sabe que eso no es verdad.
Se sacó de la manga institutos.
En materia de salud dijo que habrá medicamentos y serán garantizados en todos los rincones del país, así como llegan actualmente los refrescos.
Las mejoras tangibles para el 2024 y ¿mientras?
Reproducción autorizada citando la fuente con el siguiente enlace Quadratín Quintana Roo.
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