Termina huelga en hotel Secrets Silversands tras 298 días

08 de julio de 2020

10:14

Lilian Castro/ Quadratín Quintana Roo

PUERTO MORELOS, QRoo, 8 de julio de 2020.- Luego de 298 días, finalmente fue conjurada la huelga en el hotel Secrets Silversands, ubicado en la Riviera Cancún, que dejó pérdidas por 74.5 millones de dólares, equivalentes a más de mil 700 millones de pesos, durante el tiempo que permaneció cerrado el inmueble, en el que laboraban 650 colaboradores.

Federico Luna, vocero de la familia Navarro Aspero y apoderado de las empresas Puerto Iglesias, Can Europa y Pro Europa, propietarias del inmueble, informó que el inmueble reabriría hasta diciembre, pues requiere varios arreglos para quedar funcional y reabrir sus puertas, para lo cual se definirá su plan de negocio pues el contrato con la cadena AMResorts vence en 2025.

Explicó que el hotel necesita mantenimiento, arreglos, jardinería y pintura, pues destrozaron instalaciones, saquearon equipos de cómputo, destruyeron servidores y se llevaron terminales electrónicas, lo cual llevará de dos a tres meses reparar para reabrir, al igual que la reactivación de la renta de bodegas a proveedores, la venta de clubes vacacionales o tiempo compartido, consumos y otros conceptos.

Recordó que el movimiento de huelga fue integrado por 144 sindicalistas y mediante el oficio FGE/QR/CAN/DP/158/2019, la Fiscalía General del Estado en la Zona Norte solicitó el apoyo de la Interpol para la ubicación y detención de los empresarios españoles Miguel Nicolau Mesquida y Guillermo Nicolau Selleras, involucrados en los delitos de falsificación y uso de documentos falsos.

Sin embargo, comentó que la conclusión del conflicto fue posible debido a que el sindicato de la Confederación Revolucionaria de Obreros y Campesinos (CROC) de la Riviera Maya permitió que la decisión la tomaran los trabajadores, lo cual posibilitó el acuerdo final dando paso al acto de cancelación y bajada de banderas, con lo cual se levantaron las banderas rojinegras de los portones de acceso a la propiedad.

Recordó que la posesión de la propiedad, valuada en más de 160 millones de dólares, generó un tortuoso litigio, en el que detectó intervenciones anómalas del entonces fiscal interino Gustavo Salas, el vicefiscal Juan Carlos Aldana, y el hijo del primero, Gustavo Salas, quien actuó como asesor legal de los acusados con un despacho privado denominado Salas y Salas.