Universo Pyme

En 41 meses comprendidos entre diciembre de 2018 y abril de 2022 la cantidad de dinero que pagó Estados Unidos a México por la importación de sus productos representó una cantidad 42 por ciento superior al total del valor agregado de la economía durante 2021.

No se trata de hacer un comparativo que tiene siempre vertientes técnicas que complica el ejercicio; en todo caso se trata de confirmar lo que ya se sabe.

El motor del comercio exterior es relevante en la economía mexicana pues representa, números gruesos, 33 por ciento del poder económico nacional y dentro de las exportaciones más de 82 por ciento están dirigidas hacia la Unión Americana.

Así de importante es el comercio entre nuestro país y el de Estados Unidos. Estratégicamente es clave cuidar la relación comercial con nuestros vecinos. Se trata del mayor activo que tiene México para enfrentar con éxito los retos de la economía global.

Esas puertas y ventanas para que nuestros productos ingresen a la economía de Estados Unidos deben ser bien cuidadas.

La relación de México con Estados Unidos no es mala, pero indudablemente no atraviesa por sus mejores momentos con la clara posibilidad a complicarse.

Si el Presidente de México insiste en liarse en discusiones de temas sensibles para nuestro país y para la Unión Americana, las cosas pueden complicarse en los siguientes meses o años y claramente serán escenarios que no fortalezcan una relación que sin lugar a dudas representa el más valioso activo que tiene el futuro de nuestro país.

Pero estos elementos no cuentan para el gobierno que encabeza la administración Lopezobradorista.

Observe estas cifras.
Entre el inicio de la administración del presidente Andrés Manuel López Obrador y el mes de abril de este año datos oficiales del gobierno norteamericano dejan claro la importancia que adquiere México en la relación comercial con ellos.

En 41 meses comprendidos en el periodo comprendido (diciembre 2018 y abril del 2022) las exportaciones de Estados Unidos a México alcanzaron un total de 867 mil 22 millones de dólares.

Las importaciones que Estados Unidos realizaba desde nuestro país alcanzaron el billón 269 mil 126 millones de dólares.
El saldo entre las importaciones realizadas desde México y las exportaciones realizadas hasta nuestro territorio fue favorable a nuestra economía por un total de 371 mil 101 millones de dólares en el mismo periodo.

Ahora bien, ¿eso es mucho o poco para nuestra economía?

Tomemos en consideración el valor que consiguió agregar la economía mexicana al final del año 2021.

Comparando ese valor con la cantidad de dinero que pagó Estados Unidos por importar bienes desde nuestro país (un billón 269 mil 127 millones de dólares) tenemos que esas importaciones representaron un valor en pesos (25 billones 382 mil 540 millones) superior en 42 por ciento al total de valor agregado que fue capaz de generar México a lo largo del año 2021.

Tan solo el saldo superavitario de nuestro país en el comercio internacional entre Estados Unidos y México en el periodo que comprende este artículo (371 mil 101 millones de dólares) representó 41 por ciento del valor agregado por la economía mexicana durante todo 2021.

Más allá de nuestra trayectoria nacionalista que en mucho se basa en la defensa de los intereses territoriales y patrimoniales respecto a Estados Unidos, que durante muchos meses fue un país visto y sentido como proclive al intervencionismo, en el escenario global nuestra relación económica con los vecinos del norte es fundamental para articular un futuro con mejores perspectivas de avance en los retos de construir una nación equitativa y con menores niveles de pobreza y pobreza extrema.

El solo comercio y su garantía de acceso de productos mexicanos hacia Canadá y Estados Unidos es un activo importantísimo para la economía mexicana y sobre de esta ventaja competitiva podemos articular nuevos compromisos para sacar provecho de las nuevas tendencias, tecnologías e inversiones que se requerirán para el cambio del paradigma energético en el mundo.

Las puertas y ventanas que estarán abiertas o que se pueden abrir para que este esfuerzo mundial se concrete serán innumerables y gracias a ello las oportunidades de combatir la pobreza y pobreza extrema en México tendría una real y grandiosa ´posibilidad de tener éxito.
Tenemos que cuidar esa relación sin que ello signifique una renuncia a nuestros principios básicos en materia diplomática exterior.

La idea de construir sobre el Temec nuevos y ambiciosos compromisos parece no tener lugar en la mente de quien encabeza el actual gobierno federal.

Reproducción autorizada citando la fuente con el siguiente enlace Quadratín Quintana Roo.

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