Con alegre plenitud pueblo maya recuerda a las ánimas

FELIPE CARRILLO PUERTO, QRoo, 2 de noviembre de 2020.- Hay plena celebración, es el noj k’íin, gran día para recordar a los adultos difuntos, los nukuch pixano’ob, y el 8 de noviembre continuará con el tradicional biix, será cuando le ofrezcamos chachak waajes, tamales horneados en pib. Así se vive en las comunidades mayas la tradición del Janal Pixan, dice Gonzalo Pech Chuc.

Gonzalo es miembro de la Academia de la Lengua y Cultura Mayas de Quintana Roo, nació en la comunidad de X-pichil, nos explica que algunas familias adelantaron el acondicionamiento de sus altares debido a la pandemia. Para que no se concentre mucha la gente en un solo lugar, dijo.

El maestro de maya destaca que los jóvenes se acercan a sus madres y padres para preparar, recordar y festejar a las almas de sus seres queridos que los visitan nuevamente.

Menciona que, en su comunidad, entre los estudiantes y egresados de la Universidad Intercultural Maya, varios deciden formarse como dignatarios mayas, precisa que su primo Luis ahora es rezador maya, estudió en la Uimqroo y que otros jóvenes como él se acercan a los ejecutantes de maayapax, música maya, para continuar la tradición.

“En mi pueblo celebramos a los nukuch pixano’ob y dentro de ocho días también el tradicional biix con el debido respeto y medidas preventivas debido a la pandemia por Covid 19, de la que estamos bien enterados. Esta no impide la celebración, primeramente nuestro creador con nosotros, Ki’ichkelem yuum ta k-éetelo’on”, dice.

Antonia Poot, destacada promotora cultural de Tihosuco, menciona que la celebración del Jaanal Pixan está aún más vigente que en otros años.

“El significado de Jaanal pixan es aún más fuerte. A pesar de la pandemia, en Tihosuco somos una sociedad que se preocupa siempre por continuar sus actividades para poder sobrevivir y la celebración cobra más fuerza en estos días, porque permanecemos además fieles a nuestras creencias y tradiciones”.

Durante los ocho o nueve meses de la pandemia muchas familias regresaron a la comunidad, muchos perdieron sus empleos, los niños no van a la escuela y los jóvenes que estudiaban fuera de la comunidad ahora lo hacen en línea desde sus casas.

Antonia Poot señala que esto ha permitido también estar más de cerca de sus costumbres comunitarias y se involucran más en la celebración. “La tradición que venimos conservando generación tras generación cobra fuerza”.

Menciona que se ve “más ímpetu en los preparativos para recibir a los pixanes, se limpiaron terrenos, hay mayor limpieza en las casas, alrededor de las tumbas, y los varones desde una semana o quince días antes trajeron leña y suficiente maíz para no salir en estos días de celebración que inicia el 31 de octubre y seguirá hasta el 8 de noviembre”.

Indicó que en Tihosuco aquellos vienen siendo los días importantes pero que, en la práctica, se hacen ofrendas a los muertos en los altares durante todo el mes de noviembre.

Reproducción autorizada citando la fuente con el siguiente enlace Quadratín Quintana Roo.

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